sábado, 14 de abril de 2007

Sonia 04: Un día dual

Jueves 28 de diciembre de 2006.

Hay días que transcurren en dos planos. Lo material y lo intelectual, lo concreto y lo abstracto, el ying y el yang, la tesis y la antítesis, la milanesa y la pizza. Hoy es uno de esos días.

Me paso el día pensando en lo de Sonia 04 de ayer, en la terapia de pareja. Sus pensamiento acerca de mi vieja son errados. Sé de mala gente, es de una de las cosas que más sé, y ella no pertenece a ese grupo. Ella, al igual que yo, pertenece a ese conjunto de personas a las que en un principio resulta difícil acercarse, con las que hay que ganarse la confianza. Seres golpeados que no tienen demasiadas ganas de reincidir -en el caso de ella el amor, en el mío en general (si Sonia 04 hubiese tenido que ganarse mi confianza, íbamos fritos)-, que temen al dolor por lo que anteponen sus gruñidos. Conozco bastante gente, así. Los hay, claro, que tras los gruñidos son, en efecto, flor de hijos de puta. No es el caso de mi vieja, y no lo digo porque sea quien me parió (abstener cualquier chiste, por favor). Mi vieja es una buena mina, leal, que eligió como el culo a la hora de amar. Me pregunto cuánto me habré identificado con ella, entonces.
Pero en lo que pienso durante el día no es necesariamente en eso. No tengo dudas acerca de mi vieja. Ya no. Lo que me preocupa es que, conociendo su carácter y conociendo a Sonia 04, la relación entre ambas puede transformarse en una lucha sin cuartel. A ver, hasta ahora mamá no me dijo una sola palabra contra Sonia 04: descubrió que le había mentido la edad, un par de cosas que sucedieron deben haberle molestado, pero se mantuvo callada. No hizo lo mismo en otras ocasiones, lo cual habla de que la gente puede mejorar. Se mantuvo callada. Sí. Sonia 04, en cambio, no. Y Sonia 04 habló a partir de una radiografía que armó con datos dispersos y engañosos. Es decir, una de las cosas que me pregunto a lo largo del día es si Sonia 04 es una pelotuda o si, en verdad, me quiere tanto que detecta posibles enemigos de los cuales defenderme. Sin embargo, hasta ahora dudaba de si me quería. ¿Por qué ahora la pregunta se transforma en si me quiere tanto? Hay algo que está mal.
Otro de los hechos que me preocupa es por qué Sonia 04 dijo algo semejante. Supongamos que lo piensa, supongamos que está convencida en su error. Sonia 04 sabe que mi abuelo, que fue la mayor figura de mi vida, murió hace siete años y que aún hoy lloro cuando me acuerdo de él y hablo de anécdotas que lo involucren, como por ejemplo cuando explico que él fue una de las personas que me enseñó que la mejor forma de acercarse a los demás es por medio del humor, que no importa hacerse el payaso, parecer un idiota si el otro se ríe, si la pasa bien. Sonia 04 sabe, también, que mi viejo se pegó un tiro hace un año, que sobrevivió pero quedó tarambana, que está en un psiquiátrico. Sabe, por tanto, que las "grandes figuras" que restan en mi vida son mi abuela y mi vieja. Y mi abuela es anciana, es frágil. Y sobre la única persona firme, me dice que no me quiere. O sea: que estoy en el mundo más solo que la mierda. ¿Para qué decirle a alguien algo semejante, si es cierto. Y peor aún: ¿para qué decírselo si encima se trata de un error de apreciación?

En el otro plano, el de las acciones, hablamos varias veces en el día. Ella me dice mi amor, yo también. No se queda a dormir en lo de la abu, mañana tengo franco, quizás la acompañe de nuevo hasta Lanús. Cuando nos vemos, nos besamos, esas cosas tan propias del plano de las acciones, que alejan el otro plano. Pero lo hacen, lo sé, por un tiempo. Las ideas no se matan, decía don Domingo. Las ideas se acumulan y vuelven con todo como un huracán, sé hoy.
Aunque este 28 de diciembre aún no lo sospecho.