viernes, 4 de mayo de 2007

Sonia 04: I have a dream

Sábado 3 de febrero de 2007.

Me despierto. Remoloneo en la cama, estoy agotado. Extrañamente, el rostro de Sonia 04 apunta hacia mí. Duerme. Tiene el ceño fruncido, los labios torcidos, la boca cerrada. Miro sus manos, transformadas en puños. Una pesadilla, supongo. La beso en la frente, le acaricio el rostro, a veces esa clase de estímulo externo aplaca las fieras lanzadas por el inconsciente. El ceño cede terreno, los puños son ahora manos, mas los labios continúan anudados. Le beso los párpados, la frente, la acaricio. Las manos se abren, se relajan. Continúo mimándola un buen rato, mientras duerme -aprovecho que no me puede correr la cara para hablar de qué cosas hay que ir a devolver o cambiar-, hasta que entreabre los ojos.
-¿Pipu?
-Sí, mi amor.
Me abraza. La abrazo. La beso, suave, para que no interprete que deseo sexo -el miércoles, en la sesión de pareja, también se quejó de que yo soy una especie de sexópata, argumentando que esa mañana yo quería coger, omitiendo que la noche anterior ella me había sacado la verga del pantalón y me arrastró a la cama para zanjar la discusión-. Al separarnos, me mira a los ojos. Tiene la mirada extraña. Como si me estudiase.
-Pipu.
-¿Sí?
-¿Vos te cogiste a tu mamá?
-¿¿¿¿¿¿¿¿¿LO QUÉ???????????
-Recién soñé eso, que descubría que vos te habías cogido a tu mamá.
-Mirá vos, qué sueño loco.
-Sí.
Nos quedamos en silencio unos segundos. Luego, Sonia 04 dice:
-¿Pero te la cogiste o no?
La miro, para saber si me está jodiendo. Tiene esa mirada rara. Prefiero zanjar el tema.
-Quedate tranquila, que no me cogí a mi vieja.
-Menos mal... En serio, ¿no?
-En serio, mi amor.

Luego, Sonia 04 me cuenta más partes de su sueño. Parece que en una parte ella le estaba chupando la teta a su madre, y que luego entraba yo y ella me quería chupar la pija.
-Teta por pija, todo un negocio -digo.
Y no puedo creer que me esté contando estas cosas. O mi inconsciente es muy aburrido, o traslado toda mi imaginación a lo que escribo, pero mis sueños no pasan de lo normalito.

Por la noche, volvemos a intentar con "Alta fidelidad". La vemos completa. Cuando termina, Sonia 04 dice:
-No me gustó, pero entiendo que te guste tanto. Sos igual al personaje de John Cusack.
Y vos a la loca depresiva, pienso, pero me lo callo.

Luego, vemos "Brazil". Dice que Gaby se la recomendó mucho, que nunca la vio. Le digo que, sí, que es maravillosa, extraordinaria. La busco entre los estuches desperdigados -aún no terminé de ordenar los vestigios de la mudanza-, la ubico. Empieza.
A los diez minutos de película, Sonia 04 ya me formuló alrededor de treinta preguntas: quién es el protagonista, en qué año transcurre (no entiende eso de que es tiempo indeterminado), quién es esa mujer (la madre del protagonista), por qué el jefe es obediente con él, por qué... Le aconsejo que le preste atención a la película, porque sino va a entender menos aún. La miro. Creo que está interpretando un papel, no puede ser que entienda tan poco. Quiere que yo ejerza un saber, como si de esa forma la protegiese. De todas formas, a los veinte minutos dice:
-Esta película es muy complicada, no la entiendo.
Y se levanta. Y nos vamos a dormir.