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Querida Trotamundos:
La verdad es que con Elemental la pegaste. La verdad es que hace nueve meses que ando enloquecido detrás de esta mujer que me tiene totalmente desorientado. Por primera vez en mi vida no tengo la menor idea de qué es lo que quiere la mujer de la que estoy perdidamente enamorado. A ver si la volvés a pegar, aunque duela.
Me gustaría que leyeras los posts que escribí en mi blog (link con Elemental bajo el nombre de El señor Crab) los días 10/03, 22/03, 30/03 y 18/05. Principalmente los dos primeros.
La historia es así: soy un tipo grande, la niña en cuestión tiene 35. La diferencia de edad es casi el doble, nada menos. Pero siempre tuvo (y dice seguir teniendo) una gran admiración por mí (nos conocimos hace tres años pero siempre nos vimos como amigos). Y así fue que me zambullí. Pero siempre su respuesta fue evasiva: no siento nada como lo que vos sentís. Pero acepta seguir saliendo conmigo. Me da estremecedores abrazos, y besos (no en la boca: dice que cuando lo haga significará que me ama). De sexo ni hablar. Pero ese no es problema: tengo otras fuentes. Pero insisto, no querrías leer primero mi historia contada desoladoramente por mí, y después seguimos hablando? Tengo también, como Elemental, una pequeña novela escrita, pero me temo que eso sea ya demasiado abusar. Espero tu opinión.
Un beso
Respuesta de la Trotamundos:
Mi estimado Sr. Crab:
Ante todo, muchas gracias por la confianza de contarme la historia que lo aqueja. Me alegra que esté abierto a escuchar mi opinión al respecto aunque pueda sonar dura (desde ya le aviso que no soy muy fan de la conmiseración), pero sepa que está hecho con buena onda. Y, como con todo, siempre hay que tomar las cosas con pinzas. Nadie tiene la verdad ni la bola de cristal.
Hecho las salvedades del asunto, he aquí mi diagnóstico y las inevitables recomendaciones que espero que le puedan ayudar en algo.
Empiezo:
Ud. dice: "¿Pero acaso uno elige enamorarse, aún sabiendo el riesgo de que no habrá de ser correspondido?"
Mi humilde opinión es que uno se enamora también de la mirada que el otro nos devuelve: aceptación, admiración, amor, etc. Yo creo que si eso no está, es un amor solitario. O si lo que devuelve el otro es algo que no nos conforma, también hay algo que deberia ser revisado.
Ud dice: "¡Qué lindo es estar enamorado! ¡Qué sensación de plenitud que da saberse poseído por ese sentir tan noble, tan generoso, tan delicado, tan enriquecedor! Saber que nuestra vida cobra ahora otro sentido porque tenemos a alguien a quien consagrarla... (...)
Porque sigo estándolo, y de la mejor manera: sabiendo que todo lo que siento es en vano"
Insisto en que esta descripción hace referencia a un amor solitario, a un enamoramiento que no es causado por el otro sino por la fantasía que el otro representa, donde el otro es sólo la cara de la estampita a quien se le está entregando la devoción.
Ud. dice: "Verla me causaba esa inexplicable mezcla de goce y dolor".
Aquí, para mí, está la clave del enganche. Por un lado, dicen que no hay amor sin dolor, pero me parece a mí que para amarga está la vida. ¿Qué sentido tiene estar con alguien que nos da dolor? ¿Dónde está el placer si no hay niguno? ¿En la ilusión nada más?
Ud. dice: "Julia me reprochaba que la asediaba y pedía verla constantemente (¿pero no es lo normal en un enamorado?), que ella tenía miles de problemas que atender (es muy cierto) y que de esa manera se los acrecentaba en lugar de significarle un refugio. Me dice que digo que me siento postergado, y que no es para nada así. Yo le reprocho a mi vez que me decía mañana nos vemos, y luego que había surgido un imprevisto y no iba a poder ser, y que me lo corría, y así. Pero sentía que todo era un poco absurdo ¿para qué todo esto ahora, justo cuando todo estaba terminado? Le pregunté cuál era el sentido de que me hubiera llamado para aclarar cosas que ya no tenía sentido aclarar. La respuesta no fue muy clara".
Es una relación que por alguna razón pone en juego una fantasía de ambos que les da placer en ese plano fantaseoso. Si decide cortarla, sugiero que no sea con ceremonia ni entierro. Si es una relación fantasmática sin cuerpo, no hay nada que velar.
Ud. dice: "Mi idea es que no quiere dejar que tome el control. Tiene un exacerbado sentido de la libertad y no quiere perderla, menos a manos de alguien que ha demostrado ser un poco obsesivo y exigente (tuvo una malísima experiencia con su pareja anterior en ese sentido)".
Las interpretaciones son inevitables para comprender y racionalizar a nuestra manera lo que al otro le pasa. Pero lo cierto y lo más desesperante es que no se puede entender al otro. Uno no está en la cabeza ni en el corazón del otro. Entao, cuando no hay nada que armar de a dos, hay que pensar por uno. Cuando uno se enamora, cede un poco de sí mismo. Tengo la sospecha que Ud. ta vez piensa que su obsesividad y exigencia es lo que la aleja. No pierda tiempo pensando esas cosas, conozco gente que se enamora de los obses, eso no es limitante.
Diagnóstico: Me parece que el dolor ya pasó de la raya, que se sobrecargó la cuota de dolor que te gustaba. Ya hay angustia. Si no, no me estarías contando esto a mí. Entonces... al vez haya que operar. ¿Por qué me dice esto, Dra. Trotamundos??? Varias razones que paso a enumerar. Sé que será difícil que mis palabras te causen algo que tal vez te ayuden a salirte de esta situación, pero es mi mejor intento.
1) Esto te hace perder el tiempo. No te conduce a nada, no te conduce hacia donde vos querés, que es una pareja correspondida, cuerpo incluido.
2) Esta relación, lamento informarte, no va a cambiar. Perdón por la dureza, pero creéme que así es. A nadie se le retarda tanto el deseo y vos ya te estás medio embolando, tal vez sostenés la situación porque invertiste bastante en esto (tiempo, ganas, orquídeas).
Ya ves que unos besos y se echó para atrás. Vos tal vez pensás que ganaste terreno, yo te digo que en realidad hasta que la mina llegue hasta ese lugar de disponibilidad podés estar toda una vida. De más está decir que es bastante histérica (aunque sea una mina increíble, es una petit histérica) y aunque logres tener una relación con ella, no sé si te va a satisfacer.
3) No te quepa la menor duda que si vos la cortás, la mina se va a inquietar y te va a buscar, pero sabé también que a la menor bola que le des, vuelven a la misma historia, tarde o temprano.
4) No conozco a nadie que haya tenido malas experiencias que no se anime a formar una pareja. COnozco historias de malas experiencias que con mayor o menor dificultad volvieron a enamorarse y a animarse (se me viene a la cabeza la mina que le tiraron ácido en la cara). O sea, la dificultad de esta mina no está en su pasado ni la solución en que vos le garantices cosas. La mina no tiene un buen deseo armado.
5) Hay mucho hombre complicado y mucha mina complicada. Lo mejor es escapar de la gente que viene así. Creo que dándole bola a una mina que tal vez no es tan histérica pero tiene algo más sólido para ofrecer habrá un caso menos de desencuentro. Así que, si cortás esta histe/oria y mirás alrededor, tal vez te podés cruzar con alguien que en una de esas no tiene tooodo aquello que querés como esta señorita (nadie es tan perfecto), pero tal vez tenga mucho para dar. Eso sí, tal vez no sea taaan excitante como esta chica porque no te tendrá en ascuas, pero será más parecido a lo que decís que estas buscando.
Esta muchacha no hace honor a lo que vos decís que querés.
Mucha suerte y contáme qué opinás.